El alcalde de Santa Cruz de la Sierra, Jhonny Fernández, acudió la mañana de este jueves, 9 de marzo, a oficinas de la Gobernación de Santa Cruz para firmar unos trámites ante la Notaría de Gobierno; sin embargo, a su arribo fue recibido con insultos, abucheos y con una serie de cuestionamientos por un nutrido grupo de personas.
“Llévense a Tongo, liberen a Camacho”, coreaba el grupo de unas 30 personas que llegó hasta el edificio de la Gobernación. Los detractores del alcalde lo calificaron de “traidor” y “vendido” y amenazaron con realizar una “calle de la amargura” en su contra.
Lo cuestionaron por la falta de atención en los hospitales de primer y segundo nivel, por el descuido de las áreas verdes de la ciudad, por su afinidad con el Gobierno nacional y por la falta de apoyo hacia el gobernador Luis Fernando Camacho, encarcelado en La Paz desde el 30 de diciembre.
“Santa Cruz te va a cobrar todo lo que estás haciendo ahora, sos un vendido, pero ya no vas a ser alcalde de aquí para adelante, grábatelo, No piensa en las personas de escasos recursos que están llorando en los hospitales”, reprochó una mujer.
Después de estar encerrado por más de una hora en una oficina de la Gobernación, finalmente un cuerpo de gendarmes municipales llegó hasta el edificio para ayudar al alcalde a salir del edificio y a abordar su vehículo. No obstante, cuando la autoridad salió le lanzaron una botella de plástico con agua, además de huevos y hielos.
