El juez tomó esta determinación para darle tiempo a las partes de poder conciliar debido a las incongruencias dentro del proceso, señaló el abogado de Rómulo Calvo, Fernando Vaca.
A su vez, al término de la audiencia, el exlíder cívico dijo a los medios: “Ha aparecido una nueva figura en combinación tanto de los abogados de la parte acusadora como de la defensa”.
Este caso fue abierto por los asambleístas del Movimiento Al Socialismo (MAS), que acusaron a Calvo de decir que la wiphala es un “trapo que no lo representa» y solicitar que se quite del mástil de la plaza 24 de Septiembre, durante los actos de la efeméride departamental en 2021.
Por esas supuestas declaraciones, el exlíder cívico es investigado por los presuntos delitos de agravio, ultraje a símbolos patrios e incitación al racismo. Sin embargo, él sostiene que no estuvo presente en ese acto.
“Yo creo que aquí hay una confusión, todo el mundo sabe que (este proceso es por) puros criterios personales. Es ilógico que la fiscal llegue hasta estas instancias, yo creo que la fiscal Margot Vargas no ha hecho su trabajo, no ha investigado nada y ahora nosotros estamos pagando las consecuencias”, manifestó Calvo.
En la audiencia de este viernes debían declarar al menos 16 parlamentarios citados como testigos de ambas partes. Pero, debido a la falta de tiempo, sólo los testigos de los denunciantes pudieron hacer uso de la palabra.
El juez Alberto Moreira tomó la determinación de brindar un tiempo de seis días para que los asambleístas del MAS y el exlíder cívico lleguen a una conciliación, por lo que, el juicio será retomado el próximo jueves.
“Insto a las partes a que se sienten a conciliar. En la siguiente audiencia consultaré si las partes se han sentado a conversar”, señaló el juez.
El fiscal Osvaldo Tejerina, dijo que de aceptarse esta solicitud por parte de los denunciantes, Calvo no tendría una sentencia por la figura de racismo, sino un perdón judicial.