Luego de una noche con violencia y denuncias de irregularidades, la Cámara de Diputados, presidida por el ala “arcista” avanza en la aprobación de créditos solicitados por el Gobierno mediante la modalidad del voto secreto.

En la madrugada y, después de hechos de violencia, el “arcismo” logró llevar adelante la votación a pesar de las protestas de los opositores.

De inició la oposición sostenía que el “arcismo” no tenía los votos para llevar adelante la aprobación, pero en la votación secreta aparecieron más votos a favor de los créditos de lo que se tenía esperado.

En la votación para el crédito de Apoyo de emergencia para respuesta a COVID-19, hubo 67 votos a favor y 57 en contra.

El diputado de Creemos, Erwin Bazán, explicó que el “arcismo” sólo tenía 40 votos, por lo cual el resto de los votos a favor eran de diputados “vendidos” de su propia alianza, Comunidad Ciudadana y el “evismo”.

Precisó que de Creemos ya se denunció anteriormente que había diputados vendidos al MAS, pero en esta ocasión de Comunidad Ciudadana se denunció que diputados del ala de Manfred Reyes Villa votaron con el “arcismo”.

La diputada de Comunidad Ciudadana, Luciana Campero, identificó a dos diputadas de Cochabamba, del ala de Reyes Villa, a quien calificó de “vendidas”. Publicó en X, las fotos de sus colegas Ana María Saavedra y Claudia Torrez.

En medio de ese conflicto, hasta la primera hora de la mañana, la Cámara de Diputados aprobó en grande y detalle los créditos de 15 mil millones de yenes de la cooperación japonesa para el ‘Apoyo de emergencia para respuesta a COVID-19’ y de 56 millones de dólares del Fonplata para el Proyecto Construcción con Pavimento Camino Faja Norte (Yapacani).

Se determinó enviar los proyectos al Senado para su revisión. En dicha Cámara, el «evismo» y la oposición tiene mayoría e, incluso, el jueves paralizó el tratamiento de un crédito anterior dado por aprobado por el «arcismo» en Diputados, mientras se indagaban irregularidades.

Aún quedan en agenda cuatro créditos y las dos leyes antiprórroga de magistrados, aunque el “arcismo” ya anunció su posición de que éstas últimas deben remitirse a la Asamblea, dado que ha concluido su plazo de tratamiento en Diputados. La exigencia de los opositores y «evistas» era tratar antes las leyes antiprórroga.