En medio de la incertidumbre por el calendario electoral debido a la demora de las elecciones judiciales y la proximidad de las primarias y presidenciales, el presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Oscar Hassenteufel, estableció una fecha tentativa para los comicios generales.
Para la programación de las elecciones, Hassenteufel recordó que el próximo gobierno debe ser posesionado el 8 de noviembre de 2025, cuando se cumplen cinco años de la gestión actual.
“Considerando que por ley se debe prever la posibilidad de realizar una segunda vuelta, entonces las elecciones deben efectuarse en agosto de 2025”, afirmó Hassenteufel, en una entrevista con el portal Brújula Digital.
La segunda vuelta, en caso de ser necesario, debe desarrollarse 60 días después de las elecciones, que se realizarían probablemente el domingo 17 de agosto de 2025, por lo que el balotaje tendría lugar el domingo 19 de octubre para dar el tiempo suficiente al escrutinio oficial y llegar sin inconvenientes al cambio de gobierno.
Siguiendo los plazos, las elecciones deben convocarse en abril de 2025 y, luego realizarse la inscripción de candidatos. Este cronograma reduce los tiempos políticos de los diferentes actores interesados en participar en los comicios.
Antes de las elecciones presidenciales, en el ámbito político se debe resolver el futuro de las elecciones presidenciales, tomando en cuenta que existen propuestas de eliminarlas.
Desde hace varias semanas, el vocal del TSE Tahuichi Tahuichi Quispe viene advirtiendo que las judiciales, cuyo proceso sigue demorado en la Asamblea Legislativa, no pueden ser organizadas al mismo tiempo que las primarias, por lo que insiste con suprimir este proceso previo a las elecciones presidenciales.