En el primer trimestre de 2024, La Paz y Santa Cruz fueron las regiones que presentaron mayores hechos de conflictividad reflejados a través de una serie de medidas de presión, entre éstos, el bloqueo de caminos, refiere un informe de la Defensoría del Pueblo.
De acuerdo con el detalle, la mayor parte de conflictos reportados se produjeron en La Paz y Santa Cruz, con 18 y 17 hechos de conflictividad respectivamente; seguidos de los de Potosí y Beni, ambos con 16, y Cochabamba, con 15.
Los hechos de conflictividad en las regiones han persistido con mayor prolongación de tiempo y mayor intensidad en sus medidas de presión, como es el caso de los bloqueos de carreteras en enero, debido a la demanda de elecciones judiciales y la exigencia de renuncia por la prórroga de autoridades judiciales, teniendo como epicentro a Cochabamba, Potosí y Santa Cruz.
Hechos
El reporte señala que, en los tres primeros meses de esta gestión, se suscitaron 103 conflictos, de los que al menos 94 fueron vulneraciones a los derechos humanos.
De acuerdo con el detalle publicado en el informe defensorial, se registraron 39 vulneraciones del derecho al empleo y al trabajo, ocho del derecho a la educación, seis vulneraciones del derecho al medioambiente y seis del derecho a la salud y acceso a la salud.
También hace referencia a seis vulneraciones del derecho a la infraestructura del transporte, seis del derecho a la infraestructura urbana, cinco vulneraciones del derecho a contar con infraestructura de servicio, cinco del derecho al acceso a la justicia, cuatro del derecho político, tres vulneraciones del derecho a una jurisdicción de entidad territorial autónoma, tres del derecho al acceso al agua potable y tres del derecho al acceso a la electricidad.
“Este informe fundamentalmente quiere contribuir a generar espacios de reflexión, de diálogo, espacios que nos permitan reconstruir la convivencia entre bolivianas y bolivianos”, señaló el defensor del pueblo, Pedro Callisaya Aro.
La autoridad remarcó que estos escenarios de conflictividad confluyen a generar una alta potencialidad de vulneración de los derechos humanos.
Alerta temprana
El “Informe de conflictividad en Bolivia” fue elaborado con datos y estadísticas proporcionados por el Sistema de Monitoreo y Alerta Temprana (Simat) de la Defensoría del Pueblo, un mecanismo tecnológico e innovador implementado para generar seguimiento y alertas tempranas de conflictos.
“Monitorear la conflictividad en nuestro país tiene una alta importancia porque nos permite no sólo saber la cantidad de conflictos que se desarrollan en un determinado periodo, sino que nos permiten a las instancias competentes acciones conducentes a solucionar esta conflictividad”.