Tito E. A. fue capturado en El Alto este miércoles tras estar ocho años prófugo con ayuda de sus familiares. El sujeto, que era taxista en Argentina, es acusado de violar a una joven que en el momento de la agresión tenía 20 años.

El caso fue presentado este jueves por el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, quien confirmó que el sujeto fue extraditado el miércoles hasta Argentina. “Este sujeto es acusado de uno de los casos de mayor relevancia en la República de Argentina”, sostuvo.

El delito por el que es acusado el sujeto se registró el 2015, en la zona de Palermo, Buenos Aires, capital de Argentina. De acuerdo a medios argentinos, el sujeto transportó en su taxi a Manuela, la víctima, y aprovechó que ella quedó dormida para cometer el delito, luego confesó todo a su entonces pareja, quien acudió a las autoridades policiales para denunciarlo.

Desde entonces, en Argentina no se tuvo rastro de este sujeto, logró evadir a la Justicia por ocho años, hasta que esta semana cayó en El Alto, Bolivia. Del Castillo, señaló que en febrero de este año se halló la primera pista para detectar el paradero de este sujeto, se identificó que sus familiares pasaban con frecuencia por pasos irregulares entre Bolivia y Argentina.

La investigación también siguió en Argentina, el diario Infobae, reporta que las autoridades identificaron “distintos abonados telefónicos relacionados a los familiares más directos del sospechoso” con lo que se confirmó que estaba en Bolivia.

De esa manera, se obtuvo que tanto la madre del acusado como la pareja de la mujer “enviaron en distintos momentos dinero” a una jovende la ciudad El Alto, quien resultó ser la novia del prófugo.

Después de un seguimiento a estas personas, la Policía en Bolivia logró identificar al acusado y procedió a su captura esta semana en El Alto.

En estos ocho años se ofrecía recompensa por la captura de este sujeto. En la actualidad esta ascendía a 5 millones de pesos argentinos (18.351 $us).

Del Castillo, remarcó que este caso fue muy sonado en Argentina porque la víctima, Manuela se animó a escribir un libro como una forma de lidiar con la situación que atravesó.