El pasado año terminó con 25 infanticidios contabilizados en todo el país, de acuerdo con datos difundidos por la Fiscalía General del Estado. La mayor incidencia está en el departamento de Santa Cruz con 8 víctimas.
De acuerdo con el detalle, luego le sigue La Paz con 6, Potosí 4, Cochabamba 4, mientras que Oruro, Beni y Chuquisaca registraron 1 víctima, cada uno, en el caso de Tarija y Pando no hubo ningún hecho.
La mayor cantidad de decesos (14 en toral) fueron entre 0 a 2 años de edad, 4 de 9 a 12 años, 4 de 3 a 5 años y 3 de 6 a 8 años de edad.
Del total de casos abiertos en el Ministerio Público, el 88% de autores fueron identificados y enfrentan un proceso penal, informó el fiscal general del Estado, Juan Lanchipa, de acuerdo a un boletín de prensa.
“Estos hechos no pueden seguirse dando en nuestro Estado, es por eso que todas las instituciones llamadas por Ley deben aunar esfuerzos para erradicar la violencia infantil en todos los ámbitos, este grupo vulnerable merece la máxima protección del Estado a través de sus autoridades”, indicó.
Lanchipa afirmó que los datos de 2023 reflejan una reducción de muertes en niñas, niños e infantes con relación al pasado año (38 casos), sin embargo, instó a que las autoridades deban seguir trabajando en la labor de prevención para sensibilizar y prevenir este tipo de violencia.
“Sin duda, en estos casos se deben aplicar sanciones ejemplificadoras a través de procesos penales en los cuales se respeten los plazos procesales y se concluya en tiempos razonables para garantizar el acceso a la justicia de las víctimas y de esta forma se termine con la impunidad”, añadió.
En la actualidad, del total de 25 casos, 7 se encuentran con sentencia, otros 7 en etapa preparatoria, 3 con extensión por muerte del agresor, 3 en etapa preliminar, 2 con rechazo y 2 con acusación formal.
Según el reporte del Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF), 9 víctimas perdieron la vida a consecuencia de golpe o trauma, 8 por asfixia, 3 por quemaduras, 3 por arma blanca y 2 por intoxicación.
