Las autoridades de Rusia han confirmado este lunes que entregó unos 100.000 barriles de petróleo refinado a Corea del Norte a lo largo de 2023 a medida que aumenta la polémica por el creciente acercamiento entre ambos países.
El Comité del Consejo de Seguridad de la ONU establecido en relación con las sanciones a Corea del Norte ha recabado los datos entregados por Rusia, que ha indicado que se hizo entrega de unos 44.655 barriles en enero de 2023, seguidos por otros 10.666 en febrero y 50.525 durante el resto del año. Esto supone un total de 105.845 barriles.
En virtud de la resolución 2397 de la ONU, los envíos de petróleo refinado por parte de países miembro a Corea del Norte están limitados a los 500.000 barriles al año, una cifra que, en este sentido, Rusia no habría superado. Los Estados miembro están obligados a informar del suministro mensual a la ONU.
En diciembre de 2022, Rusia reanudó el suministro de petróleo refinado a Corea del Norte por primera vez en más de dos años. A pesar de la intensificación de la cooperación militar entre Rusia y Corea del Norte, el suministro de petróleo refinado de Moscú en 2023 se mantuvo muy por debajo de los niveles anteriores a la pandemia, tal y como muestran estos datos, a los que ha tenido acceso la agencia de noticias Yonhap.
No obstante, existen indicios que apuntan a que Corea del Norte podría haber obtenido petróleo mediante transferencias ilegales en barco tras cerrar su frontera a causa de la pandemia de COVID-19.
El acercamiento entre Rusia y Corea del Norte ha llevado a países como Estados Unidos, Corea del Sur y Japón a acusar a Pyongyang de suministrar armamento a Rusia en plena invasión de Ucrania, algo que han condenado contundentemente pero que ha sido rechazado. Según las autoridades norcoreanas, estas informaciones son «falsas» y «absurdas», y «no merecen ningún tipo de comentario o aclaración» al respecto.