La Cancillería del Estado Plurinacional de Bolivia no descarta que el caso de los 69 bolivianos varados en Barcelona, cuando iban en un crucero, se trate de un tema de trata y tráfico de personas.
«Hay que ver si son migrantes objeto de tráfico ilícito. Habrá que definir eso bien y cómo ha sido la venta de los pasajes y las supuestas visas falsas, y en función a eso pasar a las otras instancias del Estado», dijo el viceministro de Gestión Consular Fernando Pérez, según reporte de La Razón.
La autoridad, en ese sentido, explicó que el cónsul boliviano en Barcelona, Martín Bazurco, «está haciendo seguimiento in situ» del proceso de trámite migratorio del grupo, «pero habrá que ver con cada persona cómo ha adquirido el pasaje, si lo ha adquirido de manera directa con la empresa, si lo ha hecho con algunas agencias de viaje».
«Vamos a sacar una comunicación a las autoridades del Consejo Plurinacional contra la Trata (y Tráfico de Personas) porque esto puede ser una red, eso tendría que investigarse, las otras entidades del Estado también tendrán que colaborar en esto», sostuvo en otro contacto con Unitel.
69 bolivianos tomaron un viaje del MSC Cruceros – desde Brasil- que llegó el martes al puerto de Barcelona. Sin embargo, ahí, el pasado martes, se descubrió que los connacionales portaban visados no válidos – gestionados por la propia empresa- para ingresar en el espacio Schengen europeo.
Tras estar varados por dos días, ayer, jueves, finalmente el gobierno español determinó que los ciudadanos provenientes de Bolivia -entre los que se encuentran 14 menores de edad- sean deportados de vuelta a La Paz, y las más de 1400 personas restantes de la embarcación puedan seguir el viaje con destino a Italia.
Luego de negociaciones con la Policía, autoridades aeroportuarias, la Embajada y Cancillería de Bolivia, se llegó a un acuerdo para determinar la instalación de una «zona de tránsito» en la terminal, en donde se les brindará comida, atención sanitaria y el posterior traslado de los viajeros con visas falsas a otro ferry, mientras se realiza el proceso administrativo de la deportación. Según informó El País, la compañía MSC se hará cargo de todos los gastos.
La Delegación del Gobierno informó además que se les «negó el acceso a territorio español» oficialmente, y que los trámites de extranjería «se realizarán por la vía de urgencia para que tengan la resolución lo antes posible».
Mientras se realizan los trámites de denegación de entrada, los bolivianos son realojados en una embarcación especial de la empresa que permanecerá anclada en el puerto de Barcelona. Una vez deportados, el regreso se hará por vía aérea directo a La Paz.
La empresa también se hará cargo del vuelo de regreso de 275 pasajeros brasileños que también deben regresar a su país.