El gigante informático estadounidense Microsoft anunció el miércoles el despido de unos 10.000 empleados de aquí a finales de marzo, cerca del 5% de su personal, entre otras medidas de reducción de costes.
Según explicó el grupo en un documento bursátil, toma esta decisión «en respuesta a las condiciones macroeconómicas y a los cambios en las prioridades de los clientes».
Estas medidas representan 1.200 millones de dólares de costos que se inscribirán en las cuentas del segundo trimestre de su año fiscal, que termina el 24 de enero.
La facturación de la firma prevista por el mercado en ese período debería subir 2,7% en comparación a igual período del año anterior, un monto pequeño para una empresa acostumbrada a crecimiento de dos dígitos.
En una carta a los empleados que fue hecha pública, el número uno de Microsoft, Satya Nadella, explica que si bien «los clientes aumentaron sus gastos informáticos durante la pandemia»
La empresa continuará invirtiendo estratégicamente en el cloud y en las fusiones y adquisiciones Activision, apostando a la innovación ChatGPT, al tiempo que reduce las áreas que no son estratégicas.