Fuerzas israelíes han realizado hoy más incursiones en Cisjordania, donde esta madrugada mataron a un joven palestino y arrestaron a más de 75 personas en distintos lugares.

Según la agencia oficial de noticias Wafa, un palestino de 18 años murió por disparos israelíes en una operación militar del Ejército en el campo de refugiados de Balata, en la urbe de Nablus, situada en el norte del territorio cisjordano y uno de los bastiones de las milicias palestinas. Además, otros tres fueron heridos de bala.

De acuerdo con la misma fuente, tropas israelíes allanaron varios domicilios en el campo y arrestaron a nueve personas, mientras que causaron daños materiales en calles y un monumento del campo.

A su vez, como va sucediendo día tras días, el Ejército arrestó hoy a al menos otros setenta palestinos en otros lugares de Cisjordania como la ciudad de Yenín, también en el norte.

También detuvo a más de una quincena de personas en la gobernación de Hebrón y realizó arrestos en Jerusalén Este, en la zona del distrito de Ramala o en la urbe de Qalqiliya. En esta última ciudad del noroeste cisjordano se llevó a más de treinta detenidos.

Israel y Cisjordania viven su mayor escalada de violencia en dos décadas, que se ha intensificado aún más desde el estallido de la guerra entre el Israel y Hamás el pasado 7 de octubre.

En lo que va de 2023, unos 437 palestinos han muerto por fuego israelí en Cisjordania, 226 de ellos desde el 7 de octubre.

A su vez, desde esta fecha Israel arrestó a casi 2.000 palestinos, al menos 1.100 de ellos sospechosos de tener lazos con Hamás.

Israel tomó control de Cisjordania en 1967 y desde entonces mantiene un largo régimen de ocupación militar y colonización sobre este territorio.