Las investigaciones contra Evo Morales en Argentina avanzan. En las últimas horas, la Fundación Apolo anunció la ampliación de la denuncia contra un familiar del dirigente cocalero y un exmilitar, quienes le habrían “facilitado acceso a menores de edad”.
“La ampliación será contra un pariente y la otra es una persona que en su momento era una autoridad militar (de Bolivia) (…). Esas son las dos personas que de acuerdo a investigaciones periodísticas habrían facilitado el acceso a menores y si fuera cierto estas dos personas habrían incurrido, en un principio, en el delito de trata de menores de acuerdo a la legislación argentina”, informó el jefe del Área Legal de la Fundación Apolo, José Magioncalda.
Morales fue denunciado penalmente en el vecino país por la presunta comisión de delitos vinculados a trata de personas con fines de explotación sexual y abuso de menores durante su asilo entre 2019 y 2020.
“Vamos a aportar nueva información en el expediente sobre las complicidades, porque entendemos que, como Evo Morales es una persona muy conocida tanto en Argentina como en el resto de Latinoamérica, era muy difícil y más estando asilado y no pudiendo ingresar a Bolivia por temor a quedar preso, en ese entonces él difícilmente podía ir en persona buscar compañía para traerla a la Argentina”, explicó el jurista, en entrevista con Red Uno.
Indicó que se concluyó que, si existió ese delito de abuso de menores y de trata de personas, estas ocurrieron con complicidad y existen “investigaciones periodísticas que apuntan a algunas personas”, quienes serán denunciadas en las próximas horas.
La denuncia judicial contra el dirigente cocalero está planteada en los “artículos 145 bis, 145 ter, 119 y 120” del Código Penal argentino, de acuerdo con el periódico Clarín, está respaldada por testimonios y publicaciones periodísticas que citan esos casos.
Además de fuentes señalan que Morales convivió en Argentina “con menores de edad que habrían sido trasladadas desde Bolivia, en condiciones presuntamente vulnerables”.
Angélica Ponce, exdirigente intercultural boliviana, por ejemplo, denunció que, durante sus visitas al expresidente en Argentina, observó a menores cumpliendo roles que describió como «serviles» en la residencia del expresidente pagada por el anterior gobierno argentino.
Ponce también afirmó que Morales recibía «niñas como obsequios» de quienes deseaban obtener favores gubernamentales, agregando que este tipo de hechos era ampliamente conocido en sus círculos cercanos.