El reciente deceso de un conductor boliviano de un camión cisterna, que estaba varado en Paraguay, a la espera de realizar el carguío de combustible en la localidad de San Antonio, se debió a un infarto de miocardio y además se encontraba consumiendo bebidas alcohólicas, según el fiscal de esa ciudad, Lucrecio Cabrera.
“Pudimos determinar que la muerte se debió, según el médico forense, a un infarto del miocardio y también la persona estaba consumiendo bebidas alcohólicas, porque había alrededor envases”, explicó en entrevista con el diario ABC Color.
El deceso, de acuerdo con el fiscal, fue considerado por causas naturales; de esa manera se descartó que exista un hecho punible o que amerite una investigación al respecto. El hombre no tenía ningún familiar que lo acompañe en el viaje.
Respecto a las condiciones en las que se encuentran en el estacionamiento denominado “Avispón” desde hace más de un mes, aseguró que, al tratarse de una empresa privada, no existe mucho que hacer.
“Son ellos los que tienen que exigir si son tanta cantidad de personas”, añadió al medio paraguayo.
Se maneja la cifra de cinco decesos de bolivianos hasta el momento, pero en el vecino país se tienen tres confirmados, los dos primeros fueron ingresados al Hospital de Ñemby, en Paraguay, bajo un cuadro de aparente infarto.