El vicepresidente, David Choquehuanca, instó ayer, durante la inauguración en Roma del Año Internacional de los Camélidos, a reparar la vulnerabilidad del hábitat de estos animales.
“Ha llegado el tiempo de reconocer que los camélidos son seres de inquebrantable energía y cumplen un rol protagónico en la construcción de civilizaciones desde hace 45 millones de años”, dijo.
Choquehuanca intervino en el foro desarrollado en el contexto del 174 Consejo Ejecutivo de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación.
Insistió en la necesidad de asumir la tarea de sensibilizar al mundo sobre las manifestaciones de vida con una memoria genética que supera los 45 millones de años.
El vicemandatario alertó que estos animales también son víctimas de la crisis y la injusticia climática, porque enfrentan amenazas a su hábitat, la escasez de agua en su pastoreo y las fluctuaciones de su precio en la fibra.
A partir de estos argumentos, convocó a la comunidad internacional y a los pueblos del mundo a reparar este daño, a través de la realización de lo que denominó Asamblea de la Tierra para fomentar los pilares de la cultura de la vida ante la amenaza que representa la inteligencia artificial.
Por su parte, la ministra de Relaciones Exteriores, Celinda Sosa, sostuvo que los camélidos son para Bolivia los reyes de los desiertos y de las alturas, por lo cual están dentro de uno de los símbolos patrios: el escudo nacional.
Integrante de la delegación que encabeza Choquehuanca junto al vicecanciller Freddy Mamani, Sosa explicó que, en Sudamérica antes de la vida republicana, esta especie sirvió para la comunicación entre los pueblos, el transporte de cargas y la provisión de fibras.