Arabia Saudita ejecutó a dos militares en actividad condenados por delitos de “alta traición”, informó este jueves el Ministerio de Defensa de la monarquía árabe, un anuncio poco habitual en el país ultraconservador donde al menos un centenar de civiles han sido ejecutados en lo que va de año.
Según un comunicado oficial, los ejecutados, un teniente coronel y un sargento, “habían sido condenados por traición, ya que cometieron una serie de delitos militares importantes”.
“El primero cometió el delito de traición militar, y de falta de protección de los intereses de la nación y el honor del servicio militar (…) el otro cometió delitos de alta traición, traición a la patria y traición militar”, indica la nota, reproducida por la agencia oficial de noticias saudí, SPA.
Afirmó también que el teniente coronel piloto Mayid bin Musa Awaad al Balaui y el sargento jefe Yusef bin Reda Hasan al Azouni “habían recibido todas las garantías judiciales” y que durante los interrogatorios y el juicio “reconocieron lo que se les atribuía”.
“Se emitieron dos sentencias que demuestran su culpabilidad por lo que se les atribuyó, y fueron condenados a muerte”, añadió el comunicado, que apuntó que los dos veredictos “fueron ratificados” y “una orden real había sido emitida para su ejecución”.
El ministerio no dio a conocer los motivos concretos por los que los dos militares fueron condenados a muerte, su fecha o la fecha de las sentencias.
Arabia Saudita no suele informar de la ejecución de militares por “alta tradición”, si bien de cuando en cuando anuncia la ejecución de saudíes o residentes civiles condenados a muerte por asesinato, tráfico de drogas, sodomía o terrorismo.
Yemen, el vecino del sur, es el único frente abierto en el que intervienen militares saudíes, sobre todo aviación militar, dado que Riad lidera desde 2015 una coalición militar árabe en apoyo al Gobierno internacionalmente reconocido.
Según aseguró Amnistía Internacional (AI) en julio, el reino árabe ha ejecutado a al menos 100 personas, civiles, en lo que va del año.
En 2022, Arabia Saudita ejecutó a un total de 196 personas, 81 de las cuales en un solo día, lo que representa la cifra más alta de aplicación de la pena capital en el país de los últimos 30 años, según AI.