En el proyecto de Ley del Presupuesto General del Estado (PGE) 2024, que envió el Ejecutivo a la Asamblea Legislativa, se pretende contraer una deuda hasta de 2.000.000.000 de dólares con la emisión de valores. Sin embargo, el país tiene una baja calificación con un alto riesgo, lo que haría que el pago de intereses sería alto.
«Se autoriza al Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, en el marco de lo establecido en los numerales 8 y 10 del Parágrafo I del Artículo 158, y el Artículo 322 de la Constitución Política del Estado, en representación del Estado Plurinacional de Bolivia, celebrar operaciones de deuda pública en los mercados de capital externos por un monto de hasta $us 2.000.000.000», dice el parágrafo I del artículo 7, del proyecto del PGE 2024, titulado «Endeudamiento Público mediante emisión de títulos de valor en mercados de capital externos».
La semana pasada, la calificadora internacional de riesgos Standard & Poor’s (S&P) bajó la calificación de Bolivia de B- a CCC+, lo que significa que el país tiene un serio riesgo de ingresar a una situación de insolvencia.
Esa calificación hace que los organismos internacionales piensen mucho antes de otorgar créditos al país. En caso de hacerlo, el interés sería más alto por el riesgo de deuda.
La calificadora advierte que la categorización de Bolivia podría bajar más en los próximos 12 meses si continúa un «estancamiento político», que limita la capacidad del Gobierno para revertir la disminución de la liquidez externa que pone en riesgo el pago del servicio de deuda.
En caso de bajar la calificación, es más improbable que existan instituciones que quieran comprar los títulos de valores que emita el gobierno boliviano.
Esta semana, la Fundación Jubileo indicó que, a septiembre de este año, la deuda externa alcanzó los 13.408.000 de dólares y cada boliviano ya debe más de 1.000 dólares.
«Actualmente, se ha llegado a una situación límite. El déficit y endeudamiento se tornan insostenibles, con riesgo de default (impago) y las reservas prácticamente se han agotado. El país está nuevamente en riesgo de una crisis de deuda después de cuatro décadas», sostuvo Jubileo.