La inestabilidad económica, agravada por la falta de combustible y la escasez de divisas, está golpeando fuertemente al sector lechero en Santa Cruz. Según el productor Zenón Flores, la situación es crítica, con un 30% de las unidades productivas ya cerradas debido a las dificultades económicas.
Flores, quien ha visto de cerca la decadencia del sector, señaló que la sequía, los altos costos de insumos veterinarios y alimenticios, y el bajo precio de la leche pagado por la empresa PIL han hecho insostenible la producción lechera, especialmente para pequeños y medianos productores.
«Hace dos años, advertí en la feria de la leche que el sector estaba en decadencia y en riesgo de desaparecer. Nadie prestó atención, y ahora seguimos cerrando», lamentó en declaraciones a Erbol/Santa Cruz.
El productor subrayó que el precio pagado por la leche no compensa los costos crecientes de producción, incluidos los salarios y el mantenimiento. La falta de combustible ha empeorado aún más la situación. «Apenas ha llegado un kit de gasolina, lo que hace que la situación sea bastante difícil», comentó Flores.
El sector lechero en Santa Cruz enfrenta una crisis sin precedentes, y los productores instan al gobierno a tomar medidas urgentes para evitar más cierres. De no tomarse acciones inmediatas, la situación podría tener consecuencias devastadoras para la economía local.