En medio de la preocupación de las gobernaciones del país que advierten la disminución de los techos presupuestarios de cara al 2024, la directora de Programación y Gestión Presupuestaria del Gobierno nacional, Gloria Villanueva, sostuvo que está en manos de las autoridades subnacionales hacer una distribución equitativa de los recursos que manejan y priorizar así sus proyectos.
“Está en ellos poder hacer una distribución equitativa, priorizar lo que está ya en ejecución y asignar los recursos de manera adecuada al interior (de la respectiva administración departamental)”, apuntó Villanueva en entrevista con el aparato de comunicación estatal.
La ejecutiva sostuvo que el 8 de septiembre las entidades subnacionales tienen que presentar su plan operativo anual y es ahí donde tienen que hacer esta distribución equitativa, priorizar sus programas y proyectos en ejecución, siempre con el fin de poder atender las demandas de la población.
Villanueva recalcó que el presupuesto que asigna el Estado a los gobiernos subnacionales es una estimación que proviene del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) y las regalías petroleras, pero también habla de los recursos que estos generan por diferentes conceptos, por lo que rechazó la postura de autoridades departamentales que advierten recortes.
“No podríamos hablar de recorte porque son recursos que van a percibir recién la siguiente gestión, o sea, no estamos recortando nada, es una proyección y en la mayoría de las gestiones estos recursos han incrementado. Y esos recursos se van inscribiendo a lo largo de la gestión”, apuntó la funcionario.
La ejecutiva reiteró que las estimaciones se realizan con los ingresos que se perciben por los hidrocarburos y estos son aspectos ligados a los precios internacionales y a los volúmenes de venta que tenemos. Por ejemplo, en el 2022 estos precios estaban en 95 dólares el barril del petróleo. Al 31 de agosto se tiene un precio de 71 dólares para este concepto.
“Con relación a los volúmenes de venta (de hidrocarburos), estos han ido bajando y precisamente nuestros mercados de Brasil y la Argentina han demandado menos productos (gas), entonces tenemos también un efecto que en el sector nos impacta y precisamente impacta más a las regiones que son dependientes de estos recursos, como Tarija, Santa Cruz y Cochabamba. Entonces, ahí se ve un efecto para la gestión 2024”, reconoció Villanueva.
Y es justamente desde estas regiones, a las que se suman también Beni y Chuquisaca desde donde advierten que el techo presupuestario baja y amenaza a los proyectos que tienen en agenda, incluso para mantener a flote las operaciones.