Desde la Cámara Boliviana de Turismo (Cabotur) advirtieron que Emirates, una aerolínea con sede en Dubái (Emiratos Árabes Unidos) ha decidido suspender temporalmente la venta de boletos aéreos en todo el mercado boliviano, alertando que esta situación golpea a los operadores del sector en el país, en específico a las agencias de viaje.

La información sale a la luz después de que las aerolíneas que son parte del holding francés Air France – KLM también hicieron un anuncio de las mismas características, lo que hace encender las alarmas en el sector privado del país y entre los usuarios que utilizan estas aerolíneas al hacer conexiones en viajes internacionales.

Según Cabotur, la señal que dan las aerolíneas es clara: la escasez de dólares en Bolivia impide que los bancos giren remesas al exterior, por lo que prefieren que los boletos se vendan a través de sus plataformas digitales para evitar esta complicación, lo que perjudica al usuario, a las agencias de viajes y al país.

“Se pierde una conexión aérea offline crucial mantenida por Air France por más de 50 años y KLM por más de 40 años en Bolivia”, advierte el reporte institucional, que también refleja que otras aerolíneas también han restringido la emisión de boletos con destino a Bolivia desde el exterior, obligando a los usuarios a comprarlos en sus plataformas digitales y pagar en dólares.

Esta situación se complica debido a las restricciones actuales en las tarjetas de crédito y débito emitidas por la banca del país.

Además, Cabotur puso en manifiesto que 16 de mayo de este año, las aerolíneas offline Royal Air Maroc y APG Airlines, esta última representando a más de 130 aerolíneas en Bolivia, decidieron dejar de operar comercialmente en el país debido a las altas tasas de transferencia al exterior (12,6%) que debían absorber las aerolíneas.

Desde la entidad también cuestionaron las posiciones de la Autoridad de Regulación y Fiscalización de Telecomunicaciones y Transportes (ATT) y la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), que “intentando minimizar la decisión de Air France y de KLM, mostraron un lamentable desprecio por el rol que cumplen las agencias de viajes en Bolivia”, al referir que estas aerolíneas no operan en Bolivia.

La ATT señaló que estas aerolíneas no operan directamente en Bolivia y solo comercializa pasajes para tramos fuera del país, en tanto que la DGAC nombra también a KLM, pero ambas coinciden en que las dos líneas aéreas son conocidas como operadores “offline”. Además, la ATT sugiere que esta determinación no altera ni afecta la continuidad de las operaciones regulares de las aerolíneas.

“Con la suspensión de la emisión de boletos en Bolivia por parte de Air France y de KLM, la ATT y la DGAC recomiendan a los viajeros comprarlos directamente en la página web de las aerolíneas. Esto demuestra un desconocimiento de la realidad, ya que las plataformas de todas las aerolíneas solo aceptan pagos en dólares americanos y con tarjeta de crédito o débito, que deben ser realizados en una sola transacción”, advierte Cabotur, sin la opción de pagar en cuotas, como lo permiten las agencias de viaje del país.

La entidad ejemplificó la situación de la siguiente manera: si una familia de dos personas debe viajar de São Paulo a París ida y vuelta, la suma asciende desde $us 2.250, una cantidad imposible de pagar con una tarjeta de crédito o de débito en una sola transacción.

En este sentido, pidieron a las autoridades de Gobierno que se implementen medidas especiales para facilitar los pagos mediante el uso de tarjetas de crédito y de débito sin límites para la compra de boletos aéreos y servicios turísticos en general, y que los bancos puedan hacer las remesas a las aerolíneas en el exterior sin complicaciones.