Después de que el presidente Luis Arce Catacora anunciara el descubrimiento de los pozos Yarará X-2 y Remanso X-1 en el departamento cruceño, el presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen, señaló que el mejor de los escenarios y con el pleno funcionamiento de estos espacios se puede reducir entre un 10% y un 15% la importación de combustibles.
Sin embargo, no será hasta finales de 2024 o mediados de 2025 que esto pueda concretarse siempre y cuando se ejecuten las inversiones respectivas para el impulso de estos proyectos, según manifestó el ejecutivo en una entrevista con la red UNITEL.
“Es cuestión de uno o dos años de perforación de pozos y tener los sistemas de recolección y uno ya puede comenzar a ver la producción de los pozos exploratorios”, explicó el ejecutivo al referir que son pozos que se perforan relativamente rápido, pero se deben abordar otros temas como locaciones y licencias ambientales.
Sobre el pozo Yarará X-2, el titular de la petrolera estatal manifestó que se detectó que tiene un petróleo un poco ‘más pesado’, lo cual permite que al ingresar a la refinería pueda tener mayores rendimientos de diésel, que el petróleo condensado que normalmente se produce en Bolivia. La proyección es de 1.500 barriles de petróleo por día.
Actualmente, según reseñó Dorgathen, el consumo diario de petróleo en Bolivia ronda los 6.000 metros cúbicos por día, lo que significan cerca de 37.800 barriles.
Mientras que en el Remanso X-1 se podrá obtener petróleo y gas natural con miras a la exportación, un “recurso bastante interesante” que está en el área de Okinawa y que ingresando a la refinería dará lugar a la formulación de gasolina. Según las proyecciones, el área cuenta con 0,7 trillones de pies cúbicos de gas y 52 millones de barriles de líquidos, un “área bastante generosa”.
“El objetivo es comenzar ya. Tenemos ya camino, planchada, por ende es mucho más fácil. Lo que un poco termina generando un retraso en los proyectos es la adquisición de materiales, que en general en el mundo el tema de los contenedores es un poco complicado poder importar algunos tipos de insumos, sin embargo estamos pensando de que esto deberíamos estarlo perforando entre el primer semestre máximo, segundo semestre del próximo año”, matizó.
Con este anuncio, el ejecutivo remarcó que esto quiere decir que “vamos a disminuir nuestro porcentaje de importación a partir de 2025, en alrededor de entre un 10% y un 15% de dependencia por estos dos campos”, tomando en cuenta también otros pozos que están en agenda como el Yarará X-1 y Yope.
A esto se suma la proyección que hay con el impulso de dos plantas de biodiésel, una en Palmasola (Santa Cruz) y otra en Senkata (La Paz), la cuales ya están en desarrollo, tema en el que será fundamental el aporte del sector productivo para la provisión de etanol, insumo que se mezcla con el combustible.
“Estas dos plantas nos van a permitir reducir otro 10%”, subrayó y se prevé que también se integre otro proyecto de diésel ecológico. “El objetivo es entre todo poder llegar a sustituir un 70% de las importaciones de diésel”, concluyó.
