La lucha contra los incendios es reforzada con la implementación de una nueva estrategia de «ataque masivo y seguido» que busca extinguir el fuego que afecta a la Chiquitanía, informó este lunes el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes.
«La estrategia de un ataque masivo y seguido contra la cabeza de los incendios nos va a ayudar a controlar los incendios y empezar a sofocar, especialmente en la zona de la Chiquitanía», dijo la autoridad en entrevista con Bolivia TV.
El fin de semana, arribaron al país un helicóptero con sistema Bambi Bucket y un avión Electra, este último de origen canadiense que tiene la capacidad de descarga de 11.300 litros.
Calvimontes explicó que el trabajo de la cisterna aeronave se complementa con el de los dos aviones Hércules de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) y de los Diablos Negros, que tienen una capacidad de descarga de 9.000 litros, a través de las cajas Guardián.
«En cada operativo se hace una descarga de alrededor de 30.000 litros del día. Ayer (domingo) han empezado a operar, estamos a la espera de los primeros resultados hasta el mediodía», añadió Calvimontes. Asimismo, explicó que los bomberos forestales operan también por vía terrestre con el plan «Brechas de Esperanza», medida coordinada entre diferentes instituciones.
Según esta cartera de Estado, con este esfuerzo coordinado y el despliegue de recursos especializados y las acciones de mitigación, se refuerza la protección de la vida, el patrimonio y el medioambiente de las comunidades afectadas por los incendios forestales.