La calidad del aire en la capital cruceña ha vuelto a clasificarse como «muy mala», según el Índice de Calidad del Aire (ICA), debido a los incendios forestales que siguen activos en la región. Esta clasificación indica que tanto la población en general como los grupos de riesgo pueden experimentar afecciones o molestias en su salud al estar expuestos a altos niveles de contaminación.
Se recomienda a los ciudadanos limitar su exposición al aire libre, evitar actividades físicas intensas y, si es necesario, usar mascarillas. Las autoridades advierten que mientras persistan los incendios en los municipios y departamentos cercanos, es probable que Santa Cruz continúe sufriendo las consecuencias de la contaminación atmosférica.