La tragedia ambiental en el municipio de Roboré continúa agravándose. Los voraces incendios forestales, avivados por fuertes vientos, dejaron un panorama desolador, con animales carbonizados y comunidades afectadas por la humareda.
Fotografías desgarradoras muestran los restos de una vaca y un caballo completamente calcinados a un costado de la carretera Bioceánica. La presencia de una soga cerca de los cuerpos sugiere que los animales estaban atados y no pudieron escapar de las llamas.
Las comunidades de San Lorenzo Nuevo, San Lorenzo Viejo y El Naranjo se encuentran en alerta máxima, ya que el fuego se acerca peligrosamente a sus hogares. Los habitantes viven con el temor de perderlo todo y comenzaron a evaluar la posibilidad de evacuar a niños y ancianos hacia zonas seguras para protegerlos de la densa humareda y posibles infecciones respiratorias.
Según el reporte de medios cruceños, este miércoles un minibús quedó completamente destruido por las llamas al salirse de la ruta, mientras que dos trenes de carga, uno con soya y otro con gasolina, se encuentran varados a la espera de que los bomberos logren enfriar las vías para garantizar su seguridad.