El hallazgo de 1,7 trillones de pies cúbicos (TCF) en el megacampo descubierto a partir del pozo Mayaya Centro X1 (en el norte paceño) demandará al menos cuatro años para su explotación comercial y una inversión de 1.500 millones de dólares.
“Estamos hablando de que las inversiones, podrían superar los 1.300 y 1.500 millones de dólares; pero, por otra parte, estamos hablando de que la renta petrolera que se puede estimar por este monto, podría llegar a 6.000 millones de dólares que, sin duda, son importantes”, declaró ayer el ministro de Hidrocarburos y Energías (MHE), Franklin Molina.
En un video colgado en la página oficial del MHE en Facebook, Molina explicó que YPFB tendrá que presentar un proyecto que incorpore los pozos delimitadores, construcción de facilidades, incluyendo plantas de procesamiento y ductos que se conecten a los ya existentes.
Al respecto, el investigador de la Fundación Jubileo, Raúl Velásquez, comento que aún es prematuro concluir si se trata de un megacampo o no, pues aún faltan aplicar dos perforaciones de prueba.
“Cuando hablamos de responsabilidad, es importante informar que no se puede medir las reserva a partir de un sólo pozo. Hacen falta al menos dos más”, dijo.