El viernes 5 de mayo, representante nacional de la Compañía de Jesús en Bolivia, Bernardo M.V., y el delegado para la Creación de Ambientes Sanos y Seguros en Comunidades e Instituciones Jesuitas en Bolivia, Osvaldo CH. P., comparecieron ante la Fiscalía Departamental de La Paz para declarar en calidad de testigos en el caso de pederastia del sacerdote jesuita Alfonso Pedrajas.
Daniela Cáceres, directora de la unidad especializada de Delitos en Razón de Género y Juvenil de la Fiscalía General del Estado, informó que existen tres procesos abiertos: dos en La Paz por la Procuraduría General y la Compañía de Jesús, y uno de Cochabamba, de oficio.
“El propósito es que ambos testigos puedan dar detalles y ayudar en la investigación, toda vez que se destituyó a ocho sacerdotes provinciales, las informaciones que nos proporcionaron es muy importante”, cuestionó Cáceres, citada por Erbol.
Las declaraciones, que duraron casi todo el día, fueron consideradas como “muy importantes” por la Fiscalía, que investiga los delitos que se habrían cometido en contra de alumnos del internado Juan XXIII de Cochabamba en años pasados.
El caso fue hecho público a través de un reportaje del diario español El País el pasado 29 de abril y se volvió cada vez más grande, con la presentación de una denuncia formal del procurador general del Estado contra las personas que habrían encubierto los abusos sexuales de Pedrajas.