La ministra de la Presidencia, María Nela Prada, afirmó este domingo que la “alianza” entre Evo Morales, Carlos Mesa y Luis Fernando Camacho se ha consolidado en la última sesión de la Asamblea Legislativa, “cruzando ríos de sangre”, y advirtió que ahora busca acortar el mandato del presidente Luis Arce Catacora.
Prada señaló que la decisión de Evo Morales ignora el dolor y la sangre del pueblo boliviano, porque se unió a la derecha y a los neoliberales serviles al imperio y a quienes dieron el golpe de Estado.
“Mesa y Camacho están traicionando en esta alianza con Evo y él está traicionando, obviamente, también a nuestra militancia, al pueblo que, por supuesto, votó en contra tanto de Camacho como de Mesa”, declaró en el canal estatal.
Según Prada, no es un invento la idea de acortar el mandato del presidente. “Nosotros tenemos información respecto a determinadas reuniones y conversaciones… Desde el evismo se habla de que no quisieran que nuestro presidente, por ejemplo, sea el presidente del Bicentenario”, comentó.
Añadió que el segundo elemento de este plan es empezar a generar desestabilización, movilizaciones, convulsión, inestabilidad e incertidumbre, con miras a un acortamiento del mandato.
Indicó que el pueblo debe estar consciente porque quienes pagarán las consecuencias de la tremenda irresponsabilidad de estas personas con la economía y la vida del pueblo, son justamente los ciudadanos.
Prada recordó que esta situación se ha enfrentado desde el primer día de gobierno, no solo por parte de la derecha tradicional, sino también por quien es ahora la principal ficha e instrumento de la derecha nacional e internacional para desestabilizar al gobierno con miras a acabar con el proceso de cambio.
Explicó que los cacerolazos son una idea del evismo y parte de los planes de la alianza que ha deteriorado la Asamblea Legislativa Plurinacional, donde se han impuesto ambiciones políticas personales antes de pensar en la patria.
Señaló que los planes de sabotaje y boicot buscan generar desgaste e inestabilidad, a partir del acuerdo que firmaron en el Senado en base a un acuerdo político entre estas tres bancadas, algo que hubiese sido impensable hace algunos años, pero que se consolidó en la sesión de la semana pasada.
