“La relación está quebrada”, confirmó este viernes Luis Gutiérrez sobre lo que ocurre en el camarín de Oriente, club que un día antes vivió atípico, extraño, pues hubo insultos entre miembros del plantel y un amago de pugilato entre Luis Méndez, ayudante de campo de Tucho Antelo, y ‘Guti’.

El técnico dirigió sus dardos al defensor, que fue señalado como el líder de una supuesta camarilla que busca la salida de Antelo.

Un día después, Gutiérrez manifestó su postura y descalificó lo expuesto por Tucho señalando que él solo reaccionó a los insultos que venían de parte del estratega.

Señaló que en las primeras horas de este viernes no tenía ninguna notificación en el que se señale su despido por lo que no caerá en el incumplimiento de no presentarse a los entrenamientos. “Si recibimos el memorándum, pues ya acabó nuestro tema contractual y ahí arreglaremos el tema económico”, apuntó.

Como parte de los sucesos ocurridos en San Antonio, contó que “los 34 jugadores” se reunieron con el presidente del club, Ronald Raldes, al que le manifestaron “que este señor (Antelo) está manejando mal al grupo y la verdad que nadie está de acuerdo con su actuar y proceder dentro del plantel”.

“Lo importante es no hacer daño al club”, dijo Gutiérrez, aunque dijo que la posición del plantel era no entrenar, algo que finalmente no ocurrió pues los futbolistas salieron cerca de las 09:00 de este viernes al gramado de San Antonio, se reunieron por unos minutos en el centro del campo y luego se tomaron una fotografía para finalmente abandonar la cancha.

Con esta situación se corre el riesgo que el primer equipo no juegue el domingo ante The Strongest, duelo que se tendrá en el Tahuichi (19:30) por lo que se abre la posibilidad que sean juveniles los que enfrenten al Tigre.

En la conferencia de prensa que brindó Raldes junto a Tucho, adelantó que se revisará de manera individual la situación de cada jugador y que son 45 los futbolistas habilitados para jugar el Clausura, esto, ante una posibilidad que el plantel ingrese en paro.