El presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Oscar Hassenteufel, afirmó que «no hay ninguna posibilidad de que haya un doble registro en el padrón electoral», respaldando así la fiabilidad del instrumento electoral. Durante una entrevista con Erbol, Hassenteufel explicó que, en abril, se llevará a cabo una nueva auditoría, esta vez a cargo del Centro de Asesoría y Promoción Electoral (Capel), una secretaría ejecutiva de la Unión Interamericana de Organismos Electorales (Uniore) para reforzar la confianza de la ciudadanía.
En este sentido, recordó la auditoría realizada por la Organización de Estados Americanos (OEA) en 2017, que certificó la confiabilidad del padrón en un impresionante 98,9%.
Hassenteufel explicó que el padrón electoral actualmente cuenta con 7,3 millones de electores y que se verifica la singularidad de cada registro mediante la comparación de diez huellas digitales.
Además, destacó las medidas implementadas para mantener la integridad del padrón, como la campaña iniciada en 2020 para que los familiares informen sobre el fallecimiento de sus seres queridos.
En cuanto a la actualización del padrón, Hassenteufel mencionó que la Ley 018 del Órgano Electoral establece su permanente actualización con la inclusión de nuevos votantes mayores de 18 años y extranjeros que cumplen con los requisitos para participar en las elecciones. También subrayó el continuo proceso de depuración de los registros, eliminando a los ciudadanos fallecidos y a aquellos que no han participado en las dos últimas votaciones de manera consecutiva.
Renovación tecnológica y seguridad biométrica
El presidente del TSE también abordó el tema de la tecnología biométrica, señalando los intentos fallidos de actualizar la plataforma en años anteriores. Destacó que el último intento, realizado el año pasado, fue anulado debido a cuestionamientos sobre la empresa adjudicataria del proceso. Esta situación ha llevado a que la tecnología utilizada actualmente comience a quedar obsoleta.
Para abordar este desafío, Hassenteufel anunció que se están elaborando términos de referencia más abiertos para permitir la participación tanto de empresas extranjeras como nacionales en una nueva licitación destinada a la renovación de equipos. A pesar de estos desafíos, afirmó que el registro biométrico es seguro, ya que se basa en una tecnología respaldada por una agencia de seguridad, lo que dificulta cualquier intento de hackeo de los datos biométricos.