Esta vez los protagonistas son los trabajadores del Sindicato de Ramas Médicas de Salud Pública (Sirmes) del nosocomio, que determinaron acatar la medida debido a que, desde enero, vienen solicitando los 50 ítems al Ministerio de Salud, pero hasta la fecha no son escuchados.
“Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), máximo una enfermera debe atender 8 pacientes hospitalizados, pero acá tienen que atender hasta 30 pacientes en su turno y eso realmente ya no se puede dar, no podemos seguir soportando tantas falencias”, señaló Omar Gandarilla, secretario general del Sirmes.
Como en cada paro de salud, el personal médico sólo atenderá casos de emergencias; por lo que, las consultas especializadas y cirugías programadas serán movidas para los próximos días.
En caso de no tener una respuesta favorable por parte de las autoridades del Gobierno, Gandarilla advirtió que no tendrán otra opción que reducir la atención en algunos servicios e incluso eliminar un buen número de camas.
“Si la enfermera solo puede atender 8 pacientes en hospitalización, vamos a tener que suspender las camas o cerrar ciertos servicios porque seríamos irresponsables si seguimos atendiendo en estas condiciones”, añadió.