Durante un operativo internacional ,denominado Hinterland, realizado entre la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) de Paraguay, la Policía Federal de Brasil, Europol y autoridades de Emiratos Árabes, se desmanteló una organización criminal implicada en el envío de 17 toneladas de cocaína a Europa, con transacciones que superan los 700 millones de dorales en el lapso de dos años. El líder de la organización fue capturado, y presumen que adquiría la droga desde Bolivia y Colombia, según el reporte policial.

“En Paraguay fue detenido el líder local (de) la estructura criminal, quien adquiría la droga de países como Bolivia y Colombia y las remesaba a territorio brasileño”, reportó el Senad.

El el operativo fue capturado Rodrigo Alvarenga Paredes, de 36 años, un empresario agro ganadero que tiene antecedentes de narcotráfico y lavado de dinero. Luego las fuerzas antidroga allanaron su lujosa vivienda ubicada en Asunción.

“Alvarenga se manejaba con alto perfil como empresario del ámbito financiero y agro ganadero. Fue detenido al salir de un hangar privado en Luque”, señala el reporte.

Según la investigación, en los últimos dos años la organización trasnacional envió al menos 17 toneladas a puertos europeos, de los cuales 12 toneladas fueron incautadas. El valor de esas transacciones supera los 700 millones de dólares.

Se presume que Alvarenga era un intermediario encargado de circulación de la cocaína entre los países Bolivia y Colombia y del territorio brasileño, para luego enviar la droga a Europa.

“La investigación tiene su origen en la incautación de 316 kilos de cocaína ocurrida en Hamburgo, Alemania. A partir de allí se identificó al proveedor de nacionalidad paraguaya, que adquiría cocaína producida en Bolivia y otros países y la ingresaba al Brasil a través de Ponta Porã. Luego la droga era transportada en camiones hasta Santa Catarina y Río Grande del Sur, donde las cargas eran almacenadas en las empresas de la organización criminal cercanas a los puertos de Río Grande e Itajaí”, de acuerdo al reporte del portal El Informador.

Las autoridades policiales de los países que llevan este caso buscan concretar 534 medidas judiciales en este caso, entre capturas, búsquedas, bloqueos de cuentas y secuestro de patrimonio en Brasil, Paraguay y Emiratos Árabes.

La banda utilizaba los puertos de Río Grande e Itajaí, dos importantes terminales marítimos en los sureños estados de Río Grande do Sul y Santa Catarina, para embarcar la droga producida en Bolivia y que ingresaba a Brasil por Paraguay, informó la Policía Federal brasileña en un comunicado.