El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, consideró este jueves que el incremento de casos de personas acribilladas en el país está relacionado a las intervenciones que realiza la Fuerza de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn).
“Antes no existían esta clase de asesinatos en la cuantía que estamos recibiendo en este momento. Esto se debe al gran trabajo que viene efectuando la Felcn y lamentablemente, la mayoría de los delitos que se comenten en el territorio nacional son delitos importados”, indicó Del Castillo.
“La gente que muere es gente que emerge desde Perú, Brasil. Estamos hablando de la frontera en los departamentos de Pando, Beni y Santa Cruz principalmente donde ocurren estos asesinatos”, indicó Del Castillo.
“Donde también ocurren estos asesinatos, lamentablemente, es en el trópico de Cochabamba, donde solamente en la gestión 2023 hemos logrado destruir más de 27 laboratorios de cristalización de cocaína”, agregó el titular de la cartera de Estado.
Según Del Castillo, tras las intervenciones de los agentes antinarcóticos, los narcotraficantes buscan “responsables” como un “soplón” o alguien que se hizo cargo de la protección, pero que no cumplió y que es asesinado.
Respecto al trópico de Cochabamba, Del Castillo indicó que detectaron que la droga llega de Perú y cree que en la zona “algunas personas” ofrecen protección a organizaciones criminales.
“Hemos visto que la droga emerge desde la República de Perú, la basta base, y en estos laboratorios cristalizan esta sustancia controlada, por tanto, debe haber algunas personas en el trópico de Cochabamba que estén ofreciendo protección a estas organizaciones criminales y como no pueden cumplirlo porque la Felcn está haciendo su trabajo, lamentablemente empiezan a quitarse la vida unos a otros”, indicó.
Desde el dos de diciembre a la fecha, se reportaron cuatro muertes con disparos en el trópico de Cochabamba. La Fiscalía departamental investiga un posible nexo entre estos asesinatos.
En tanto en la segunda semana de diciembre, se registraron otros dos acribillamientos, uno en Beni y otro en Santa Cruz.
