Gabriela Zapata, expareja de Evo Morales, reapareció el pasado miércoles en una audiencia de juicio por el delito de trata, porque presuntamente intentó hacer pasar a un niño como el hijo del expresidente.
La audiencia en el Tribunal Cuarto de Sentencia en lo Penal de La Paz se suspendió hasta el 4 de diciembre, debido a la ausencia de la fiscal del caso y de Evo Morales, según los abogados que forman parte del caso.
Este jueves, en una conferencia de prensa que convocó el exmandatario en Cochabamba, un periodista le preguntó sobre la reaparición de Zapata y si considera que buscan usar este proceso en su contra.
“No tenía ninguna información, no tengo nada que comentar”, respondió escuetamente Morales y luego se quedó callado, dando paso a otra pregunta de los periodistas en la conferencia.
En la comparecencia con los medios, Morales habló del Tribunal Supremo Electoral y el Congreso del MAS en Lauca Ñ, entre otros asuntos políticos, pero no quiso referirse a su exnovia.
Gabriela Zapata se hizo conocida en 2016, cuando salió a la luz un certificado de nacimiento de un supuesto hijo que hubiese tenido con Morales, además de la sospecha de que habría incurrido en tráfico de influencias para favorecerse como gerente de la empresa china CAMC.
Fue sentenciada a diez años de cárcel en 2017, debido a movimientos económicos sin justificativo, haber usado oficinas estatales como suyas, además de tener un título profesional falso. En 2021 fue liberada.