Según datos del Instituto Boliviano de Comercio (IBCE), al mes de agosto de 2023, las exportaciones cayeron en un 24% en valor y 19% en volumen, comparado a igual período de 2022, asunto que implica a los productos tradicionales y no tradicionales, según explicó el gerente general de la entidad, Gary Rodríguez.
Las exportaciones de productos tradicionales disminuyeron un 21% y 18% en valor y volumen, respectivamente, en relación al mes de agosto del 2022. Mientras que el ‘golpe’ sentido por quienes exportan productos no tradicionales es mayor, tomando en cuenta la disminución de 20% y 31% en volumen y valor, respectivamente.
Entre los productos no tradicionales, la mayor caída se refleja en productos como azúcar, castaña, alcohol y frijol. Mientras que las no tradicionales exhiben lo relacionado a la minería e hidrocarburos.
Rodríguez apuntó que, en el tema interno, los cupos que tardaron en salir para la exportación de alimentos, la escalada de la cifra de bloqueos (un asunto insufrible) que se van dando en el país, la falta de una agenda público-privada y otros asuntos, como los relacionados al tema de divisas, significan un golpe para el sector exportador.
“El resultado de esto es que las exportaciones entre enero y agosto de este año comparadas a las de enero-agosto del pasado año están $us 2.300 millones por debajo. Esto es lo que está explicando por qué tenemos una balanza deficitaria entre enero y agosto”, señaló el ejecutivo.
Ante este escenario, el ejecutivo del IBCE expuso que lo que hay que hacer es aumentar la oferta de dólares en el sistema financiero y también en el mercado libre.
“Eso pasa por exportar más. La forma ideal de hacerlo tiene que ver con aumentar la exportación de bienes y servicios. Y para eso tenemos que armar una agenda conjunta con el Gobierno, eliminar los cupos de exportación y, ojalá, tener biotecnología para el agro”, sostuvo Rodríguez.