La familia de un niño de dos años vivió momentos de angustia debido a que el menor se tragó ocho agujas de uso medicinal para ganado bovino. Según los familiares, el menor jugaba en la finca donde trabaja su mamá y no se dieron cuenta del momento en que las ingiere.
La madre del menor relató que encontró tiradas las agujas y que lo más probables es que el niño estaba jugando y se las tragó. Al darse cuenta, la mujer trasladó inmediatamente a su hijo al hospital y ahí le señalaron que tenían que operarlo de emergencia.
Una radiografía mostró la cantidad de agujas que el niño ingirió y que según los médicos estaban comprometiendo el estómago y tracto intestinal, señaló un artículo de Telecinco. En total se encontraron ocho agujas del número 2 para inyecciones.
Los doctores explicaron que las agujas estaban cortadas en la parte distal y encontraron dos en el peritoneo del lado derecho, una que entró en una cavidad abdominal, tres en el lado izquierdo , uno en la pared abdominal y dos estaban peligrosamente abajo entre la vejiga y el recto.
Después de una cirugía de casi dos horas, los médicos retiraron todas las agujas e informaron que el menor se encuentra recuperándose a la espera de recibir el alta médica.