Más de 150 rescatistas prosiguieron este jueves la operación de rescate de un espeleólogo estadounidense que sufrió una hemorragia interna mientras exploraba una cueva a más de mil metros de profundidad en Turquía.
La Federación de Espeleología del país indicó que más de 150 rescatistas turcos y extranjeros trataban de llegar a Mark Dickey, que sufrió un sangrado gastrointestinal en las profundidades de la cueva de Morca, cerca de la costa mediterránea turca.
«La operación es logísticamente y técnicamente uno de los mayores rescates en cueva del mundo», afirmó la federación en un comunicado.
Colapso a 1.000 metros de profundidad
Dickey, de 40 años, enfermó el domingo a 1.120 metros de profundidad, acompañado por un equipo internacional de 13 exploradores que avisó de la situación, según la agencia de emergencias AFAD.
Fue puesto bajo observación en un campamento base a 1.040 metros bajo el suelo, donde le dieron una infusión de sangre entregada por rescatistas y médicos, añadió la federación, que lanzó la operación de rescate el martes con ayuda de la AFAD y de la Asociación Europea de Rescate de Cuevas (ECRA).
«El estado de Mark se está estabilizando», aseguró la federación. «Su sangrado paró y puede andar con ayuda, pero no le es posible salir sin una camilla».
La dificultad es justamente bajar la camilla y después subir a Dickey, pero la federación precisó que «la extracción de Mark debería comenzar en las próximas horas».
Dickey será llevado hasta un campamento provisional a 700 metros de profundidad.
La cueva de Morca es la tercera más profunda de Turquía, según la federación, con una profundidad máxima de 1.276 metros.
Los rescatistas dijeron que esta operación podría tomar varios días.